Descubre. Reflexiona. Aplica. Crece.
📖 Jonás 1:1-6
Jonás huye del Señor
1 El Señor le dio el siguiente mensaje a Jonás, hijo de Amitai: 2 «Levántate y ve a la gran ciudad de Nínive. Pronuncia mi juicio contra ella, porque he visto lo perversa que es su gente».
3 Entonces Jonás se levantó y se fue en dirección contraria para huir del Señor. Descendió al puerto de Jope donde encontró un barco que partía para Tarsis. Pagó su pasaje, subió a bordo y se embarcó rumbo a Tarsis con la esperanza de escapar del Señor.
4 Ahora bien, el Señor mandó un poderoso viento sobre el mar, el cual desató una violenta tempestad que amenazaba con despedazar el barco. 5 Temiendo por sus vidas, los desesperados marineros pedían ayuda a sus dioses y lanzaban la carga por la borda para aligerar el barco.
Todo esto sucedía mientras Jonás dormía profundamente en la bodega del barco, 6 así que el capitán bajó a buscarlo. «¿Cómo puedes dormir en medio de esta situación?—le gritó—. ¡Levántate y ora a tu dios! Quizá nos preste atención y nos perdone la vida».
Textos bíblicos tomados de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente® (NTV). Copyright © 1996, 2006, 2010, 2015 por Tyndale House Foundation. Usado con permiso de Tyndale House Publishers Inc. Todos los derechos reservados.
Desobediencia de Jonás
1 La palabra del Señor vino a Jonás, hijo de Amitai: 2 «Levántate, ve a Nínive, la gran ciudad, y proclama contra ella, porque su maldad ha subido hasta Mí». 3 Jonás se levantó, pero para huir a Tarsis, lejos de la presencia del Señor. Y descendiendo a Jope, encontró un barco que iba a Tarsis, pagó el pasaje y entró en él para ir con ellos a Tarsis, lejos de la presencia del Señor.
4 Pero el Señor desató sobre el mar un fuerte viento, y hubo una tempestad tan grande en el mar que el barco estuvo a punto de romperse. 5 Los marineros tuvieron miedo y cada uno clamaba a su dios; y arrojaron al mar la carga que estaba en el barco para aligerarlo. Pero Jonás había bajado a la bodega del barco, se había acostado y dormía profundamente. 6 El capitán se le acercó y le dijo: «¿Cómo es que estás durmiendo? ¡Levántate, invoca a tu Dios! Quizás tu Dios piense en nosotros y no pereceremos».
Textos bíblicos tomados de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA), Copyright © 2005 por The Lockman Foundation. Usadas con permiso. www.NuevaBiblia.com
Jonás huye de Jehová
1 Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo: 2 Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. 3 Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová.
4 Pero Jehová hizo levantar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad tan grande que se pensó que se partiría la nave. 5 Y los marineros tuvieron miedo, y cada uno clamaba a su dios; y echaron al mar los enseres que había en la nave, para descargarla de ellos. Pero Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir. 6 Y el patrón de la nave se le acercó y le dijo: ¿Qué tienes, dormilón? Levántate, y clama a tu Dios; quizá él tendrá compasión de nosotros, y no pereceremos.
Textos bíblicos tomados de la Reina-Valera 1960 (RVR1960). Copyright © 1960 por la Sociedad Bíblica Americana. Usado con permiso. Todos los derechos reservados.
❤️ Estudio Bíblico Guiado
🎯 Objetivo pedagógico
Reconocer las formas en que evitamos la voz de Dios y descubrir cómo su llamado personal puede transformar nuestro día a día, aún cuando nos resulta incómodo o desafiante.
📂 Introducción reflexiva
¿Te has sentido alguna vez empujado a hacer algo correcto, pero dentro de ti surge un deseo de huir, evitarlo o distraerte? Quizá se trata de una conversación pendiente, un acto de perdón, o simplemente reconocer una verdad difícil sobre ti mismo. Como Jonás, todos hemos sentido el impulso de escapar del llamado de Dios, a veces por miedo, orgullo o cansancio. Sin embargo, Dios no se rinde con nosotros: su voz nos alcanza incluso cuando intentamos escondernos, invitándonos a confiar y obedecer, porque detrás de su llamado siempre hay un propósito mayor, tanto para nosotros como para quienes nos rodean.
💬 Preguntas de conexión personal
- ¿En qué situaciones tiendes a posponer o evitar decisiones que sabes que son importantes?
- ¿Qué emociones suelen surgir en ti cuando sientes que Dios te pide algo que te incomoda?
- ¿Cómo sueles reaccionar cuando el miedo o el orgullo chocan con lo que sabes que debes hacer?
🔎 Exploración profunda del texto
- “La palabra del Señor vino a Jonás: ‘Ve a Nínive’…” (v.1–2). ¿Qué significa que Dios llame personalmente a Jonás? ¿Por qué crees que Jonás no quiso obedecer, aunque conocía a Dios? ¿Qué te revela esto sobre las veces que tú también prefieres ignorar el llamado de Dios en áreas concretas de tu vida?
- “Jonás huyó de la presencia del Señor…” (v.3). ¿Qué imágenes vienen a tu mente cuando lees que alguien intenta “huir de Dios”? ¿Qué razones honestas pueden llevarnos a querer alejarnos de lo que Dios nos pide? ¿Puedes identificar algún momento reciente en que has intentado evitar lo que sabes que es correcto?
- “Bajó a Jope, encontró un barco, pagó el pasaje y se embarcó para Tarsis…” (v.3). ¿Qué tan lejos estuvo dispuesto a ir Jonás para evitar obedecer? ¿Qué “barcos” tomas tú para distraerte o evadir decisiones difíciles? ¿Cómo afectan esas decisiones a tus relaciones, tu paz interior o tu fe?
- “El Señor lanzó un fuerte viento sobre el mar…” (v.4). ¿Qué piensas al ver que Dios permite una tormenta en el camino de Jonás? ¿Crees que Dios usa situaciones difíciles para llamarnos la atención? ¿Cómo ha usado Dios alguna “tormenta” en tu vida para guiarte de regreso a Él?
- “Jonás bajó al interior del barco, se acostó y se quedó profundamente dormido…” (v.5). ¿Por qué crees que Jonás podía dormir en medio de la tormenta? ¿De qué maneras intentas tú “dormir” o anestesiarte cuando quieres ignorar un conflicto interior o el llamado de Dios? ¿Qué consecuencias puede traer esa indiferencia en tu vida cotidiana?
- “El capitán se acercó y le dijo: ‘¿Cómo puedes dormir? ¡Levántate y clama a tu Dios!’” (v.6). ¿Cómo te impacta que una persona ajena despierte a Jonás a la realidad espiritual? ¿En qué momentos otras personas han sido ese “capitán” para ti? ¿Qué necesitas escuchar hoy para “despertar” a lo que Dios te está pidiendo?
Reflexión teológica
El relato de Jonás comienza no con la desobediencia, sino con una invitación personal de Dios a colaborar con Él en su misión de compasión. La huida de Jonás refleja nuestra tendencia humana a resistir aquello que nos confronta o incomoda. Sin embargo, Dios no deja de buscarnos, incluso utiliza circunstancias y personas inesperadas para llamarnos de regreso. Su propósito es mucho más grande que nuestra comodidad: es una invitación a experimentar su gracia, a crecer en confianza y a participar en su obra redentora.
👣 Transformación
- Identifica una situación específica en la que has estado evitando el llamado de Dios (puede ser una conversación, reconciliación, servicio, confesión, etc.) y escribe lo que te impide actuar.
- Ora cada día de esta semana, pidiendo a Dios que te muestre el “barco” o la “tormenta” en tu vida que pueden estar señalando un área donde necesitas escuchar y obedecer.
- Comparte con alguien de confianza (amigo, mentor, grupo pequeño) lo que has descubierto en este estudio y pídele que ore contigo para enfrentar juntos ese desafío.
🙏 Oración sugerida
Señor, gracias porque nunca te rindes conmigo. Aunque a veces quiero huir o esconderme de tu voz, ayúdame a reconocer tu llamado y confiar en tu propósito. Despiértame cuando me duerma en la indiferencia y dame valor para obedecer, sabiendo que tu amor siempre tiene un plan mayor para mi vida y para los que me rodean. Amén.
🛠️ Recursos Extra para Facilitadores
- Versículo para memorizar: Jonás 1:3
- Dinámica grupal: Pidan a los participantes escribir en una hoja “Mi barco de evasión” y, al finalizar, compartir de manera voluntaria cómo pueden bajarse de ese barco y confiar en Dios.
- Aplicación familiar: Lean juntos Jonás 1:1–6 y conversen sobre decisiones difíciles que deben tomar como familia. Oren juntos pidiendo valentía y dirección.