Descubre. Reflexiona. Aplica. Crece.
📖 Jonás 1:7-16
7 Entonces la tripulación echó suertes para ver quién había ofendido a los dioses y causado tan terrible tempestad. Cuando lo hicieron, la suerte señaló a Jonás como el culpable. 8 Así que los marineros le reclamaron:
—¿Por qué nos ha venido esta espantosa tormenta? ¿Quién eres? ¿En qué trabajas? ¿De qué país eres? ¿Cuál es tu nacionalidad?
9 —Soy hebreo—contestó Jonás—y temo al Señor, Dios del cielo, quien hizo el mar y la tierra.
10 Los marineros se aterraron al escuchar esto, porque Jonás ya les había contado que huía del Señor.
—¿Ay, por qué lo hiciste?—gimieron.
11 Como la tormenta seguía empeorando, le preguntaron:
—¿Qué debemos hacer contigo para detener esta tempestad?
12 —Échenme al mar—contestó Jonás—y volverá la calma. Yo sé que soy el único culpable de esta terrible tormenta.
13 Sin embargo, los marineros remaron con más fuerza para llevar el barco a tierra, pero la tempestad era tan violenta que no lo lograron. 14 Entonces clamaron al Señor, Dios de Jonás: «Oh Señor—le rogaron—, no nos dejes morir por el pecado de este hombre y no nos hagas responsables de su muerte. Oh Señor, has enviado esta tormenta sobre él y solo tú sabes por qué».
15 Entonces los marineros tomaron a Jonás y lo lanzaron al mar embravecido, ¡y al instante se detuvo la tempestad! 16 Los marineros quedaron asombrados por el gran poder del Señor, le ofrecieron un sacrificio y prometieron servirle.
Textos bíblicos tomados de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente® (NTV). Copyright © 1996, 2006, 2010, 2015 por Tyndale House Foundation. Usado con permiso de Tyndale House Publishers Inc. Todos los derechos reservados.
7 Y cada uno dijo a su compañero: «Vengan, echemos suertes para saber por causa de quién nos ha venido esta calamidad». Y echaron suertes, y cayó la suerte sobre Jonás. 8 Entonces le dijeron: «Decláranos ahora por causa de quién nos ha venido esta calamidad. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres?». 9 Él les respondió: «Soy hebreo, y temo al Señor Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra».
10 Los hombres se atemorizaron en gran manera y le dijeron: «¿Qué es esto que has hecho?». Porque ellos sabían que él huía de la presencia del Señor, por lo que él les había declarado. 11 Ellos le preguntaron: «¿Qué haremos contigo para que el mar se calme alrededor nuestro?». Pues el mar se embravecía más y más. 12 Y él les respondió: «Tómenme y láncenme al mar, y el mar se calmará alrededor de ustedes, pues yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre ustedes». 13 Los hombres se pusieron a remar con afán para volver a tierra firme, pero no pudieron, porque el mar seguía embraveciéndose contra ellos. 14 Entonces invocaron al Señor, y dijeron: «Te rogamos, oh Señor, no permitas que perezcamos ahora por causa de la vida de este hombre, ni pongas sobre nosotros sangre inocente; porque Tú, Señor, has hecho como has deseado».
15 Tomaron, pues, a Jonás y lo lanzaron al mar; y el mar cesó en su furia. 16 Y aquellos hombres temieron en gran manera al Señor; ofrecieron un sacrificio al Señor y le hicieron votos.
Textos bíblicos tomados de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA), Copyright © 2005 por The Lockman Foundation. Usadas con permiso. www.NuevaBiblia.com
7 Y dijeron cada uno a su compañero: Venid y echemos suertes, para que sepamos por causa de quién nos ha venido este mal. Y echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. 8 Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres? 9 Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. 10 Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado.
11 Y le dijeron: ¿Qué haremos contigo para que el mar se nos aquiete? Porque el mar se iba embraveciendo más y más. 12 Él les respondió: Tomadme y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros. 13 Y aquellos hombres trabajaron para hacer volver la nave a tierra; mas no pudieron, porque el mar se iba embraveciendo más y más contra ellos. 14 Entonces clamaron a Jehová y dijeron: Te rogamos ahora, Jehová, que no perezcamos nosotros por la vida de este hombre, ni pongas sobre nosotros la sangre inocente; porque tú, Jehová, has hecho como has querido. 15 Y tomaron a Jonás, y lo echaron al mar; y el mar se aquietó de su furor. 16 Y temieron aquellos hombres a Jehová con gran temor, y ofrecieron sacrificio a Jehová, e hicieron votos.
Textos bíblicos tomados de la Reina-Valera 1960 (RVR1960). Copyright © 1960 por la Sociedad Bíblica Americana. Usado con permiso. Todos los derechos reservados.
❤️ Estudio Bíblico Guiado
🎯 Objetivo pedagógico
Identificar cómo nuestras decisiones personales, incluso las que parecen “privadas”, impactan profundamente a quienes nos rodean, y descubrir la oportunidad de actuar con integridad y responsabilidad delante de Dios y los demás.
📂 Introducción reflexiva
A veces pensamos que nuestras decisiones solo nos afectan a nosotros. Quizás elegimos guardar silencio ante una injusticia, evadir una responsabilidad o mantener una actitud que sabemos que no honra a Dios. Pero, ¿alguna vez has notado cómo esas decisiones pueden generar “tormentas” a tu alrededor? Nuestras acciones —buenas o malas— tienen un efecto dominó en la familia, amigos, compañeros de trabajo e incluso en personas que no conocemos. Jonás vivió esto intensamente: su huida no solo cambió su vida, sino que puso en riesgo la vida de quienes viajaban con él. ¿Te has detenido a pensar en el impacto de tus elecciones?
💬 Preguntas de conexión personal
- ¿Recuerdas una ocasión en la que tus decisiones afectaron inesperadamente a otros?
- ¿Qué sientes cuando descubres que tus acciones tienen más alcance de lo que imaginabas?
- ¿En qué áreas de tu vida tiendes a pensar “esto solo me afecta a mí”?
🔎 Exploración profunda del texto
- “Echaron suertes y la suerte cayó sobre Jonás…” (v.7) ¿Qué piensas al ver cómo los marineros buscan una explicación para la tormenta? ¿Por qué crees que Dios permite que Jonás quede expuesto públicamente? ¿Has sentido alguna vez que tus acciones “privadas” salen a la luz y afectan a otros?
- “¿Quién eres? ¿De dónde vienes? ¿Cuál es tu ocupación?” (v.8) ¿Qué revela la serie de preguntas de los marineros sobre su deseo de entender la causa del problema? ¿Por qué es importante asumir nuestra responsabilidad en medio del conflicto? ¿Qué cambia en ti cuando dejas de culpar a otros y reconoces tu parte en una situación difícil?
- “Soy hebreo y temo al Señor… El Dios del cielo que hizo el mar y la tierra.” (v.9) ¿Qué impacto tiene la confesión de Jonás sobre los marineros? ¿Cómo influye nuestro testimonio, aun en medio de nuestra desobediencia? ¿De qué manera puedes ser honesto hoy, aun si implica reconocer tus errores?
- “¿Por qué has hecho esto?”… Los marineros se atemorizaron mucho. (v.10) ¿Qué te llama la atención de la reacción de los marineros ante la confesión de Jonás? ¿Cómo responde la gente cuando enfrentamos las consecuencias de nuestras decisiones? ¿Te cuesta pedir perdón o asumir el daño causado a otros?
- “El mar se embravecía más y más…” (v.11) ¿Qué observas en la insistencia del problema, a pesar de los esfuerzos humanos? ¿Por qué a veces, aun sabiendo qué debemos hacer, nos resistimos a cambiar? ¿Qué te impide dar el paso correcto cuando sabes que tus decisiones afectan a otros?
- “Tómenme y láncenme al mar… porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad…” (v.12–13) ¿Qué piensas de la disposición de Jonás a asumir la consecuencia? ¿Cómo te desafía esta actitud a tomar responsabilidad hoy? ¿Qué decisión concreta podrías tomar para reparar o evitar daño en tus relaciones?
- “Temieron mucho al Señor… ofrecieron sacrificios y le hicieron votos.” (v.16) ¿Qué produce en los marineros el desenlace de la historia? ¿De qué forma Dios puede usar incluso tus errores para mostrar su poder y guiar a otros hacia Él? ¿Cómo podrías transformar un error pasado en una oportunidad de restauración y testimonio?
Reflexión teológica
La historia de Jonás en alta mar muestra que nuestras decisiones, especialmente la desobediencia, nunca ocurren en aislamiento. Dios nos creó para vivir en comunidad, donde nuestras acciones influyen en los demás para bien o para mal. Aun en medio de las consecuencias dolorosas, Dios puede redirigir la historia para traer arrepentimiento, restauración y testimonio. La honestidad, el reconocimiento de culpa y la disposición a asumir responsabilidades son caminos que abren la puerta a la gracia y al perdón.
👣 Transformación
- Haz una revisión de una decisión reciente que ha afectado a otros. Pide perdón o toma medidas para reparar cualquier daño, si es necesario.
- Ora por sabiduría para discernir cómo tus palabras y acciones están influyendo en tu entorno familiar, laboral o social.
- Comparte un testimonio (en tu grupo o con un amigo) sobre una ocasión en que reconocer tu error abrió la puerta a una mejor relación o a una oportunidad de mostrar la gracia de Dios.
🙏 Oración sugerida
Señor, ayúdame a ser consciente del impacto de mis decisiones. Dame humildad para reconocer cuando me equivoco y valor para pedir perdón. Que incluso mis errores sean usados por ti para traer restauración, testimonio y bendición a quienes me rodean. Hazme responsable y sensible al efecto que tengo en mi familia, amigos y comunidad. Amén.
🛠️ Recursos Extra para Facilitadores
- Versículo para memorizar: Jonás 1:12
- Dinámica grupal: Realicen una “cadena de impacto”: cada participante menciona cómo una pequeña acción positiva o negativa puede afectar a varias personas a su alrededor.
- Aplicación familiar: Conversen sobre decisiones cotidianas (como el uso del tiempo, las palabras, o actitudes en casa) y oren juntos para ser un ejemplo de responsabilidad y restauración.