1 Corintios 1:18–2:5

Contrastar la sabiduría del mundo con la sabiduría de Dios revelada en la cruz, para aprender a confiar en el poder de Cristo y no en capacidades humanas, tanto en nuestra fe personal como en el testimonio que damos a otros.

Seguramente lo has notado: en la sociedad se admira la fuerza, la inteligencia y la elocuencia. El éxito parece medirse por títulos, logros y popularidad. Pero el evangelio nos sorprende con una paradoja: Dios eligió salvarnos a través de algo que parecía débil y ridículo —la cruz— y además, eligió a un mensajero como Pablo, con debilidades evidentes y sin adornos retóricos. Lo que parece fracaso es, en realidad, la mayor demostración de poder y sabiduría divina. La pregunta es: ¿en qué estás apoyando tu fe y tu testimonio hoy, en tu capacidad… o en Cristo crucificado?

• ¿Qué cosas considera “sabias” o “exitosas” el mundo que te rodea?
• ¿Alguna vez alguien te hizo sentir que tu fe parecía absurda o poco razonable?
• ¿Tiendes a confiar más en tu preparación y habilidades, o en la obra de Dios en ti?

1. 1:18 — La cruz: locura o poder. ¿Qué dos maneras opuestas describe Pablo sobre la cruz? ¿Por qué divide así a los que creen y a los que no? ¿Dónde has experimentado la cruz como tu verdadera fuerza en medio de debilidad?
2. 1:19–21 — La sabiduría del mundo anulada. ¿Qué afirma el texto sobre la incapacidad de la sabiduría humana para alcanzar a Dios? ¿Por qué Dios quiso salvar a través de lo que parece “locura”? ¿Cómo te desafía esto cuando valoras el conocimiento o la lógica por encima de la fe?
3. 1:22–25 — Cristo: tropiezo y poder. ¿Qué buscaban los judíos y qué los griegos? ¿Por qué Jesús crucificado resultaba escándalo o ridiculez? ¿Has sentido la tentación de exigir señales o explicaciones lógicas en lugar de confiar en Cristo?
4. 1:26–29 — Dios elige lo débil. ¿Qué tipo de personas suele elegir Dios según Pablo? ¿Qué propósito tiene que lo necio y débil avergüence lo fuerte? ¿Cómo cambia tu autoimagen al saber que Dios te usa a pesar de tus limitaciones?
5. 1:30–31 — Cristo es todo para nosotros. ¿Qué significa que Cristo sea nuestra sabiduría, justicia, santificación y redención? ¿Por qué Pablo insiste en que nadie se gloríe en sí mismo? ¿Cómo podrías practicar esta semana el gloriarte solo en Cristo y no en tus logros?
6. 2:1–5 — El estilo del mensajero. ¿Qué decidió Pablo respecto a la forma de anunciar el evangelio en Corinto? ¿Por qué evitó la retórica brillante y confió en la demostración del Espíritu y del poder? ¿Cómo se vería hoy en tu vida hablar de Cristo con sencillez y dependencia del Espíritu?

Reflexión teológica
La cruz de Cristo revela una sabiduría que el mundo no entiende: la fuerza está en la debilidad, la victoria en la aparente derrota. Dios eligió lo despreciado para mostrar que la salvación no depende de méritos humanos, sino de su gracia. En Cristo encontramos todo lo que necesitamos: justicia, santificación y redención. Además, el ejemplo de Pablo nos enseña que no basta con el contenido del evangelio, también el estilo importa: no es la elocuencia humana la que transforma vidas, sino el poder del Espíritu Santo. La iglesia vive y testifica con esta convicción: Cristo crucificado es nuestra única gloria.

1. Rinde tu orgullo. Esta semana identifica un área donde sueles confiar en tu capacidad (trabajo, estudios, liderazgo) y entrégala en oración, reconociendo que dependes de Cristo.
2. Habla de Cristo con sencillez. Comparte con alguien tu fe sin adornos, contando cómo Jesús cambió tu vida en lo personal.
3. Gloríate en la cruz. Cada vez que sientas orgullo por un logro, dale gracias a Dios y declara en tu corazón: “Mi gloria está en Cristo, no en mí”.

Padre, tu sabiduría es diferente a la del mundo. Gracias porque en la cruz de Cristo me diste lo que nunca podría lograr por mis fuerzas. Enséñame a gloriarme solo en Jesús, a confiar en tu Espíritu y a hablar con sencillez y verdad. Que mi vida y mis palabras reflejen el poder de tu cruz. Amén.