Hebreos 8:1–13

Reconocer que el nuevo pacto establecido por Cristo es superior al antiguo, para vivir en una relación renovada con Dios, basada en su gracia, su perdón y su ley escrita en el corazón.

Hay contratos que caducan, acuerdos que se rompen y promesas que se olvidan. Cuando eso pasa, la confianza se resquebraja. Pero Dios hizo un pacto nuevo y definitivo con su pueblo a través de Jesús. No es un acuerdo frágil ni externo, sino una relación viva, escrita en lo más profundo del corazón. Hebreos nos dice que lo antiguo quedó atrás porque Cristo es mediador de un pacto mejor, basado en promesas seguras. La pregunta es: ¿sigues viviendo como si dependieras de reglas externas, o disfrutas la vida nueva de gracia que Cristo ya inauguró?

• ¿Qué experiencias te han mostrado la diferencia entre una relación superficial y una verdadera?
• ¿En qué momentos sientes que tu fe se reduce a reglas más que a una relación viva con Dios?
• ¿Qué diferencia haría en tu vida vivir cada día recordando que Dios ya escribió su ley en tu corazón?

1. 8:1–2 — El sacerdote celestial. ¿Dónde ministra Jesús según el pasaje? ¿Qué diferencia hay entre el tabernáculo terrenal y el celestial? ¿Cómo te da seguridad saber que Cristo intercede desde el cielo mismo?
2. 8:3–5 — Sombras de lo real. ¿Cómo describe el texto a los sacerdotes y sus sacrificios? ¿Qué significa que eran “copia y sombra” de lo celestial? ¿Qué cosas en tu vida podrían ser solo “sombras” si no están enraizadas en Cristo?
3. 8:6 — Un pacto superior. ¿Qué hace a Cristo mediador de un mejor pacto? ¿Por qué se dice que está basado en promesas superiores? ¿Cómo cambia tu confianza el saber que Dios mismo garantiza este pacto?
4. 8:7–9 — Debilidad del pacto antiguo. ¿Qué limitación tuvo el pacto antiguo? ¿Qué ocurrió con el pueblo de Israel respecto a ese pacto? ¿En qué momentos notas que tu corazón también se aleja de la fidelidad de Dios?
5. 8:10–12 — El nuevo pacto. ¿Qué promesas incluye este pacto? ¿Cómo se diferencia de un sistema de reglas externas? ¿Qué aspecto de tu vida necesita experimentar esta renovación interior?
6. 8:13 — Lo viejo caducó. ¿Qué afirma el autor sobre lo antiguo? ¿Cómo se aplica esta verdad a quienes aún confían en méritos humanos o prácticas externas? ¿Qué te impide a veces soltar lo viejo para abrazar lo nuevo en Cristo?

Reflexión teológica
Hebreos 8 presenta con claridad que Cristo no solo inauguró un sacerdocio eterno, sino también un pacto nuevo y superior. El antiguo pacto, marcado por leyes externas, mostró la incapacidad del ser humano para cumplir plenamente. Pero en Cristo, Dios establece un pacto de gracia: escribe su ley en el corazón, ofrece una relación cercana y otorga perdón completo. Lo antiguo caducó porque algo mejor ya llegó. Vivir bajo el nuevo pacto significa descansar en la obra de Cristo y responder con una obediencia nacida del amor, no de la obligación.

1. Haz una oración esta semana agradeciendo a Dios por el perdón total en Cristo y deja atrás una culpa que sigues cargando.
2. Memoriza Hebreos 8:10 y repítelo como recordatorio de que la ley de Dios ya está escrita en tu corazón.
3. Practica una acción de gracia (servicio, ayuda, reconciliación) no por obligación, sino como fruto de la relación viva que tienes con Dios.

Padre, gracias por el nuevo pacto en Cristo. Gracias porque ya no vivo bajo reglas externas, sino bajo tu gracia y tu perdón. Escribe tu ley en mi corazón cada día, enséñame a caminar en tu amor y hazme disfrutar la libertad de una relación viva contigo. Amén.